Nuestra Señora se paseó por las calles de Pozoblanco

Después de algún tiempo anunciando los cultos y actos en honor de María Santísima de la Amargura, pudimos celebrar la festividad en su honor que la Junta de Gobierno de nuestra Cofradía designó para este fin de semana, con una agenda cofrade donde la Reina Salesiana presidiría todos los actos.

En la mañana del día de San Rafael, viernes 24 de octubre, se pudo visitar a nuestra amantísima Titular, que se encontraba expuesta en besamanos en el altar de la iglesia del Colegio Salesiano, tal y como lo hicieron los alumnos y alumnas del centro educativo bautizado con el nombre del esposo de la Virgen, la cual se encontraba expuesta en sus dos advocaciones: Amargura y Auxiliadora.

Ya el sábado, tuvo lugar el rezo del Ángelus a mediodía, tras los ensayos previos del cuerpo de acólitos que aportaría una gran dosis de solemnidad y protocolo a la tarde otoñal del día 25. La Dolorosa del Jueves Santo pozoalbense posaba ante un altar de cultos que ha sido muy aplaudido por los devotos presentes en los actos marianos acontecidos en este fin de semana, donde destacó el pionero Rosario Vespertino en nuestra ciudad y la solemne Eucaristía que se celebró al término del mismo.

En cuanto al Rosario Vespertino, decir que tuvo que modificarse el recorrido previsto, debido a obras y reformas en el adoquinado de algunas calles pozoalbenses, quedando finalmente como sigue: Iglesia del Colegio Salesiano "San José", Plaza de Padres Salesianos, Andrés Peralbo, travesía de Andrés Peralbo, Herreros, Mercado, Virgen de Lourdes, Bautista, Ramón y Cajal, Pedrajas, Obispo Pozuelo, Padres Salesianos y entrada en el templo. La asistencia fue menor al centenar de personas, con mucho respeto y orden en el transcurso del acompañamiento a la talla de Illanes, que era portada en andas por cofrades, miembros de la banda y costaleros, tras un cuerpo de acólitos digno de mentar una vez más.

Fotos: Pedro López - www.alagloria.es

Tras la soleada tarde, y ya en el templo, presidiría la solemne eucaristía el Director de la casa salesiana, Diego Molina Aguilera, asistido por D. Agustín Ruiz Rosal. A la terminación de la ceremonia, pudimos mantener una animada tertulia en la convivencia que tuvo lugar en el Centro de Antiguos Alumnos de Don Bosco "Don Eusebio Andújar". En definitiva, un fin de semana para recordar.