Nuestra carroza de Reyes recibe una subvención especial de 300 euros
Tal y como revela la información facilitada por el Gabinete de Prensa del Ayuntamiento de Pozoblanco, cuatro son las entidades que reciben una subvención especial de 300 euros, además de la prima por presentar su carroza para la Cabalgata del 5 de enero.
Y esta vez, la Cofradía de Ntra. Sra. de la Amargura ha tenido la suerte de ser una de las afortunadas, que con esta subvención ve más que recompensada la labor realizada durante el mes anterior. Y es que, tanto la Junta de Gobierno como la banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía, han estado trabajando casi a diario para participar como se merece en aquella noche mágica.
En una elección que se lleva a cabo entre los propios colectivos participantes, las ganadores de este año han sido, además de la carroza que dispuso nuestra Cofradía, la carroza del AMPAS del Colegio Salesiano, la que elaboró la AMPAS del Colegio Virgen de Luna y la que puso en escena la Asociación de Vecinos de la Barriada de San Gregorio.
Recordemos, además, que no sólo se trata de una carroza, la de la Amargura, que ha sido estilizada con recortes de espuma pintados a todo color y moldeados para conseguir un idílico y colorido jardín, que también, sino que esos árboles y hermosas flores servirían de escenario y decoración a una "doble carroza", o "carroza y media" -por llamarlo de alguna manera- que la hermandad del Jueves Santo pozoalbense sacó a la calle.
Y es que no sólo irían los mentados motivos florales en la comitiva que acompañaba a Sus Majestades Los Reyes Magos de Oriente, sino que sobre el camión irían tirando caramelos algunos pajes, que serían la premisa para lo que metros después se presentaba: tras aquel vehículo prestado por Mallas Galbis encontrábamos a una banda de cornetas y tambores pletórica, que no sólo era el colofón a una carroza magistralmente realizada, sino que aportaría la sinfonía a aquella tarde-noche lluviosa, y divertiría a pequeños y mayores con villancicos, pasodobles, canciones infantiles y diversos temas más. Banda y carroza, carroza y banda, se fusionaban en colores y disfraces, en sonido y armonía, conjuntando esos trajes de pajes árabes y, maquillados de color negro, repartirían la ilusión y diversión que los niños de Pozoblanco se merecían.
Es por ese equipo de montaje (y desmontaje), por esos pajes, y por esa formación musical de la que disponemos, por los que se agradece formar parte de este gran barco, y sinceramente, esta subvención es gracias a ellos. Gracias y enhorabuena.
Y esta vez, la Cofradía de Ntra. Sra. de la Amargura ha tenido la suerte de ser una de las afortunadas, que con esta subvención ve más que recompensada la labor realizada durante el mes anterior. Y es que, tanto la Junta de Gobierno como la banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía, han estado trabajando casi a diario para participar como se merece en aquella noche mágica.
En una elección que se lleva a cabo entre los propios colectivos participantes, las ganadores de este año han sido, además de la carroza que dispuso nuestra Cofradía, la carroza del AMPAS del Colegio Salesiano, la que elaboró la AMPAS del Colegio Virgen de Luna y la que puso en escena la Asociación de Vecinos de la Barriada de San Gregorio.
Recordemos, además, que no sólo se trata de una carroza, la de la Amargura, que ha sido estilizada con recortes de espuma pintados a todo color y moldeados para conseguir un idílico y colorido jardín, que también, sino que esos árboles y hermosas flores servirían de escenario y decoración a una "doble carroza", o "carroza y media" -por llamarlo de alguna manera- que la hermandad del Jueves Santo pozoalbense sacó a la calle.
Y es que no sólo irían los mentados motivos florales en la comitiva que acompañaba a Sus Majestades Los Reyes Magos de Oriente, sino que sobre el camión irían tirando caramelos algunos pajes, que serían la premisa para lo que metros después se presentaba: tras aquel vehículo prestado por Mallas Galbis encontrábamos a una banda de cornetas y tambores pletórica, que no sólo era el colofón a una carroza magistralmente realizada, sino que aportaría la sinfonía a aquella tarde-noche lluviosa, y divertiría a pequeños y mayores con villancicos, pasodobles, canciones infantiles y diversos temas más. Banda y carroza, carroza y banda, se fusionaban en colores y disfraces, en sonido y armonía, conjuntando esos trajes de pajes árabes y, maquillados de color negro, repartirían la ilusión y diversión que los niños de Pozoblanco se merecían.
Es por ese equipo de montaje (y desmontaje), por esos pajes, y por esa formación musical de la que disponemos, por los que se agradece formar parte de este gran barco, y sinceramente, esta subvención es gracias a ellos. Gracias y enhorabuena.
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